El Real Madrid se mereció más este martes en el Etihad Stadium. Tanto por juego como por justicia futbolística, ya que los de Zidane pudieron disponer de hasta dos penas máximas si el colegiado hubiera tenido algo más de valentía. La primera de ellas en el minuto 47, cuando Bale intentó entrar en el área rival y Otamendi le metió el cuerpo y le trabó hasta mandarle al suelo. Fue una acción dudosa que podría haberse señalado perfectamente, pero Cuneyt Cakir miró hacia otro lado a pesar de las quejas del jugador galés desde el suelo.
Sin embargo, aún quedaba el momento más indignante de la noche. Era el minuto 75 cuando Lucas Vázquez también se internaba en el área 'citizen' y de nuevo Otamendi se cruzaba en su camino y le zancadilleaba desde atrás de forma decisiva. El argentino realizó un claro e innecesario penalti, pero Cakir era esta noche el mejor aliado del conjunto inglés. Lucas y Jesé protestaron ostensiblemente ante la pasividad del colegiado, pero sin éxito. El otomano prefirió no ganarse la enemistad de los aficionados locales y se limitó a dejar que pasaran los minutos tomando siempre las decisiones más conservadoras posibles...
El Madrid reclamó un posible penalti sobre Gareth Bale https://t.co/w227haMavW #deportes pic.twitter.com/RWrc5osXuo
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El penalti sobre Lucas Vázquez no es penalti porque no lleva la camiseta del Barça. pic.twitter.com/qumuPtg81v
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