El primer penalti llegaría en el minuto 47. Bale se internaba en el área, encaraba a Otamendi, le superaba y caía al suelo tras ser empujado y travado por el central argentino. El galés no se lo podía creer pero el colegiado turco le ordenó que se levantase sin admitir protestas. La pena máxima es cuánto menos dudosa. Bale puede exagerar la caída pero no hay duda que el ex del Valencia le empuja y le mete la pierna derecha.
Minutos más tarde, Lucas era el protagonista de otro posible penalti a favor de los madridistas. Vázquez también era empujado dentro del área, también por Otamendi. En esta ocasión, el defensa del City sacaba el brazo derecho para empujar claramente al extremo madridista. La jugada tiene grandes similitudes con aquel penalti clamoroso de Mascherano a Cristiano que Undiano Mallenco dejó sin señalar.
En el club madridista se considera que Çakir fue blando y permisivo con el juego duro de los de Manuel Pellegrini. Permitió constantes faltas y no sancionó al menos uno de los dos penaltis y le perdonó la tarjeta amarilla a Otamendi en una acción clarísima de amarilla sobre Karim Benzema. La indignación es grande. El honorable turco puede haber condicionado la eliminatoria de manera flagrante.
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