Los primeros meses de Toni Kroos en Chamartín fueron espectaculares. Se adaptó a la perfección a compartir medular con Luka Modric y como si llevará toda la vida en el Real Madrid fue uno de los grandes protagonistas de las 22 victorias seguidas que logró el equipo blanco entre septiembre de 2014 y diciembre de ese mismo año.
La llegada de Benítez el verano pasó supuso un cambio de posición en el alemán y su rendimiento descendió considerablemente. De '5' puro no está cómodo y eso se le notaba en el terreno de juego. No estaba acostumbrado a jugar en esta demarcación y las lagunas tácticas que tiene el '8' para jugar en esa demarcación le hacían sufrir mucho.
Con la destitución de Rafa Benítez, Zidane se hizo cargo del primer equipo y en los casi cinco meses del francés en el banquillo Toni Kroos ha recuperado la sonrisa dentro del campo. Con Casemiro cubriéndole las espaldas, el alemán está mucho más liberado de tareas defensivas. Ahora ha vuelto a su posición original. Desde el interior ha liderado al Bayern y a la selección y ahora vuelve a hace lo propio en el Real Madrid.
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