Un giro de 180 grados de última hora lleva al centrocampista al Sporting de Portugal, a pesar del interés del Oporto.
El
Real Madrid le ha encontrado destino a otro de los futbolistas que no contaban para
Zinedine Zidane de cara a la próxima temporada:
Lucas Silva. El centrocampista brasileño, que el año pasado jugó en el Marsella cedido, lo hará el curso que viene en el
Sporting de Portugal. Sólo faltan unos flecos para que el futbolista, que ya ha pasado reconocimiento médico en Lisboa, sea jugador por un año del club luso.
Entre los pequeños detalles a definir se encuentra la inclusión o no de una opción de compra para el club portugués, en cuyo caso el
Real Madrid se reservaría también una opción de recompra. Se trata de una operación similar a la que llevó a
Casemiro al
Oporto en el verano de 2014. Precisamente los 'dragones' eran uno de los clubes interesados en el brasileño, aunque finalmente el
Sporting se ha adelantado.
Lucas Silva llegó al
Real Madrid en el mercado invernal de 2015 y disputó de blanco la segunda mitad de la temporada, teniendo poco protagonismo. El club blanco decidió cederlo al
Marsella para que creciera, aunque no cuajó en la
Ligue 1. Ahora, la idea es que se sienta más cómodo en Portugal y pueda desplegar todo el potencial que ya demostró en Brasil con el
Cruzeiro. Por delante le quedan cuatro años de contrato con el
Real Madrid y su deseo, y el del club, es demostrar que vale lo que se pagó por él hace año y medio.