El verano más barato en 13 años para el Real Madrid ha sido el de 2016. La gran plantilla que tenía ya el club blanco unida a los regresos de jugadores como Coentrao, Morata o Asensio o el ascenso de Mariano Díaz a la primera plantilla han sido clave para que Zinedine Zidane y Florentino Pérez hayan decidido no moverse en el mercado. Los blancos no tenían un verano con tan poco movimiento desde 2003.
Aquel año, el Real Madrid sólo contrató a David Beckham por 25 millones para ponerle la guinda a una plantilla de ensueño, formada por futbolistas como Roberto Carlos, Figo, Zidane, Raúl o Ronaldo entre otros muchos. La cúpula del club blanco tomó la decisión este verano de no hacer cambios radicales en la plantilla y sólo fichar para reforzar aquellas posiciones en las que hubieran salidas o déficit.
Así, al Madrid le hacía falta un lateral zurdo (más con la marcha de Arbeloa) y un delantero, por lo que regresaron Coentrao y Morata. Y con la salida de Jesé, hacía falta también un relevo para él: Marco Asensio. La continuidad de Mariano en el primer equipo ha estado motivada por su buena pretemporada y su deseo de quedarse, aunque fuera como tercer delantero.
Desde 2003, el Real Madrid había gastado más de 30 millones cada verano, llevándose la palma la temporada 2009-10, la del regreso de Florentino Pérez a la presidencia. Aquel año, el Madrid invirtió casi 264 millones de euros en nueve fichajes, entre los que se encontraron los de Cristiano Ronaldo o Karim Benzema. En 2013, con el fichaje de Bale, y 2014 con el de James Rodríguez, fue cuando más se gastó después de ese 2009. Ahora, el Madrid goza de una de las mejores plantilla de todos los tiempos.
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