Como si de una maldición se tratara, Cristiano Ronaldo condenó con sus goles a Malmö, Shakthar, Roma y Wolfsburgo. Todos ellos vieron como el crack de Madeira los destrozaba y todos ellos han visto, además, como se han quedado fuera de la mejor competición de clubes del mundo. Los cuatro tendrán que ver la Champions por la tele.
Cristiano Ronaldo, en la fase de grupos, le marcó cinco goles al Shakthar, tres en el Bernabéu y dos en Ucrania, y seis al Malmö, cuatro en Chamartín y dos más en Suecia. En octavos de final hizo un tanto en el Olímpico de Roma y otro en el Bernabéu y en cuartos remontó él solo con un hat-trick el 2-0 del partido de ida en Alemania frente al Wolfsburgo.
Todos ellos son clubes importantes en sus respectivos países y están obligados, quizá el Malmö menos, a participar año sí y año también en la Liga de Campeones, pero ninguno ha sido capaz de repetir participación este curso. Es decir, Cristiano Ronaldo tendrá que encontrar nuevos equipos a los que marcarle. El miércoles tendrá la primera oportunidad.
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