El equipo no ha suspendido en sus enfrentamientos ante Las Palmas y Dortmund, aunque tampoco ha sacado un notable. Ambos eran los desplazamientos más complicados de lo que se llevaba de temporada y el equipo demostró personalidad y un juego bueno durante bastantes minutos. Por eso Zidane cree que el Real Madrid está en el buen camino, aunque al mismo tiempo es consciente de que hay que mejorar ciertas cosas. Y entre ellas, las desconexiones que suelen tener sus jugadores en los partidos, especialmente al principio de los mismos y en sus instantes finales.
Así pues, según 'Marca' el primer entrenamiento tras el partido de Dortmund - celebrado el jueves - se desarrolló con total normalidad. El 'míster' no le reprochó nada a sus jugadores ni dio una charla fuera de lo común. No está, ni mucho menos, enfadado. En realidad, está motivado y con optimismo. Así que ahora le objetivo es preparar bien el encuentro del domingo ante el Eibar puliendo sobre el campo los pequeños defectos que hacen de este Madrid un equipo aún endeble. Y es que el entrenador sabe que estos fallos se podrán ir subsanando poco a poco en el trabajo diario, de forma que el equipo llegue al último tramo de temporada sin fisuras que provoquen que se 'resquebraje' en los últimos minutos de los partidos como sucedió en Las Palmas y Dortmund.
DEJA TU COMENTARIO