Patinazo inesperado del Real Madrid

Los blancos, que llegaron a ir ganando por 0-2, no pudieron pasar del empate en Polonia (3-3).


Gol del Madrid

Gol del Madrid




Mando del Real Madrid

Como apenas había gente en la grada, más allá de la prensa y algunos aficionados que las gestiones del Real Madrid consiguieron hacerles un hueco en el estadio, el chiste fácil de decir que los seguidores que llegaron con el tiempo justo al encuentro se perdieron el gol de Bale no da lugar.

Golazo de Bale

Y es que menos de un minuto fue lo que necesitó el conjunto de Zidane para abrir la lata goleadora del encuentro. Coentrao centraba desde la banda izquierda, Cristiano Ronaldo peinaba el balón y Gareth Bale, tras colocar su cuerpo en posición tan estética como funcional, agarraba una volea espectacular que se colaba por la escuadra de la meta local. Un golazo en la práctica y un golpe moral al partido.

Varane, cerca del 0-2

El Real Madrid había conseguido serenidad y paciencia con ese gol. El control de la pelota era claramente suyo y todo hacía pensar que los goles podían ir cayendo en el marcador como fruta madura. Varane, tras un saque de esquina de Kroos, impactó un cabezazo casi perfecto. Si no fue de 10 fue porque un defensa, bajo palos, logró evitar que la pelota terminara introduciéndose en la red del Legia.

Benzema no perdonó

Los de Zidane vivieron unos minutos en los que parecían gustarse con el balón. Combinaciones largas, juego en corto y una superioridad aplastante sobre un rival que apenas podía correr detrás de un balón que sólo tenía un dueño, el Real Madrid. Fruto de ese dominio llegaría el 0-2 al luminoso. Una pelota interior de Kovacic encontraba el desmarque de Bale, que le ganó la espalda a la zaga local, el galés levantó la cabeza y tocó para que la llegada desde atrás de Benzema fuera triunfal. Lanzamiento colocado y gol. Un paso más se había dado.



El gol de Legia dejó sabor amargo


Sin embargo, en la recta final del primer acto se volvió a ver uno de los grandes males de este Real Madrid, su poca contundencia en determinadas fases de los encuentros. En esta ocasión, los de Zidane estuvieron demasiado permisivos con el avance hasta la frontal del área de Odjidja. El jugador del Legia se sacó un lanzamiento con la zurda sideral. Imparable. La metió por toda la escuadra. Un sabor agridulce le quedaba a los blancos con la llegada del descanso. 

El Madrid estuvo cerca de romper el choque

El Real Madrid, tras el paso por los vestuarios, pareció entrar nuevamente con las energías renovadas al partido. El balón seguía estando en su poder y el Legia no tenía más remedio que refugiarse en torno a su área para salvaguardar su portería. Benzema y Bale, los autores de los goles blancos, tuvieron opciones de lograr sendos dobletes, pero al francés le quitaron de la cabeza con un despeje un remate y el galés se encontró con un buen despeje del portero del equipo polaco cuando intentó un golpeo con la zurda desde la banda derecha.

Sorprendente empate del Legia

Sin embargo, el equipo blanco volvió a recibir un pescozón cuando menos lo esperaba. Y es que el Legia sólo se acercaba al área madridista con cuentagotas, sin embargo, hacía pupa cada vez que atisbaba de cerca a Keylor Navas. De hecho, un remate con la puntera de Radovic desde fuera del área sorprendía al portero madridista y significaba el 2-2 en el marcador. Seguramente pudo hacer algo más el portero merengue. Una sorpresa desagradable para un Madrid que podía y debía ir ganando de forma cómoda pero que se encontraba con un marrón importante tras el empate de los polacos. 

Más castigo para el Madrid

Era evidente que al Real Madrid no le valía el empate y Zidane tocó zafarrancho. Los blancos se quedaron cerrando con tres defensas tras la entrada de Asensio por Coentrao. Sin embargo, la reacción más inmediata a ese cambio de sistema fue la peor posible, un gol en contra. El Legia se movió rápido al contragolpe y una dejada en la frontal sobre la llegada de Moulin terminó con un golpeo sutil e imparable del centrocampista local que, tras tocar en el palo, se introdujo como un puñal en la red del Real Madrid.

Kovacic salvaba un punto

El Real Madrid tenía por delante unos 10 minutos para evitar el descalabro en Polonia. El Legia había sacado oro puro en cada acercamiento y eso había volteado un partido que, en general, había estado más que controlado por los blancos. Por suerte para los de Zidane, dos de los incansables del equipo, Carvajal y Kovacic, se iban a juntar en la misma jugada para, con taconazo hacia atrás del canterano, y golpeo cruzado del croata conseguir un gran gol que valía el 3-3. Del mal, el menos.

Lucas envió al larguero el posible 3-4

Los minutos finales, aun sin público en las gradas, fueron especialmente emocionantes. El Madrid tuvo en el último segundo del choque una ocasión de oro para haberse llevado los tres puntos a la capital de España, sin embargo, el disparo de Lucas dentro del área terminó estrellándose en el larguero y, con ello, la posibilidad de haber terminado llevándose un encuentro que terminó en patinazo inesperado. 

Ficha técnica

Legia Varsovia 3: Malarz; Bereszynski, Rzezniczak, Pazdán, Hlousek; Kopczynski, Moulin; Guilherme, Odjidja, Radovic (Prijovic 76’); Nikolic

Real Madrid 3: Keylor Navas, Carvajal, Varane, Nacho, Coentrao (Asensio 77’), Kroos, Kovacic, Morata (Mariano 84’), Bale, Cristiano y Benzema (Lucas 64’)

Goles: 0-1 Bale (1’), 0-2 Benzema (34’), 1-2 Odjidja (39’), 2-2 Radovic (58’), 3-2 Moulin (82’), 3-3 Kovacic (85’)

Árbitro: Pavel Královec. Amonestó a

Estadio: Wojska Polskiego