James en un entrenamiento de esta temporada
James Rodríguez vivió anoche otra jornada difícil con el Real Madrid. El equipo ganó en Lisboa (1-2), pero lo cierto es que el jugador no tenía demasiadas razones para estar muy contento en el José Alvalade, ya que Zinedine Zidane en ningún momento pensó en él para que saltar al campo con la misión de ayudar a sus compañeros.
Zinedine Zidane no es un entrenador que le guste hacer el 'vacío' a algunos de sus jugadores. Él siempre intenta integrar a todos en el grupo. Pero en el caso de
James Rodríguez empieza a quedar claro que el colombiano no le termina de convencer. No en lo futbolístico, porque su calidad está fuera de toda duda; pero sí en lo que respecta a implicación y esfuerzo. Y el técnico lo va dejando claro en los pequeños detalles y gestos, como el que se vivió el martes en
Lisboa al no dar al '10' la oportunidad de saltar al campo como suplente.
Y desde luego opciones de contar con el cafetero no faltaron, ya que la lesión en el tobillo de
Bale obligó a hacer el primer cambio del partido a la hora de juego. Pero el elegido en esta ocasión fue Marco Asensio.
Zidane prefirió al joven jugador español a
James Rodríguez, y ni siquiera minutos después encontró el hueco para dar minutos al futbolista. Más que nada porque Benzema por Isco fue el siguiente cambio; mientras que
Coentrao sustituyó a
Marcelo en los minutos finales del choque.
Bien es cierto que en el fondo dos de los cambios - el de
Bale y el de
Marcelo - fueron obligados por lesión. Pero también lo es que en ninguno de ellos
Zidane entendiera que
James mereciera tener una oportunidad en el partido. Así que su mensaje fue muy evidente a pesar de que el entrenador siempre tendrá buenas palabras en público para el jugador: hoy por hoy
James es el último centrocampista de la plantilla en su rotación por detrás de competidores directos como
Kovacic, Isco o Asensio. Así que en su mano está revertir esta situación.
Anoche la cara de
James en el banquillo y en los minutos finales era de circunstancias. El jugador no estaba ni mucho menos feliz por irse de otro partido en 'blanco', pero la situación reclama una reacción por su parte. En lo que llevamos de curso únicamente ha participado en 11 partidos de las cuatro competiciones, para un total de
499 minutos. Esto hace una media de solo 45 minutos por partido. De hecho, solo ha sido titular en 5 de ellos, lo que demuestra que desde el primer momento no ha sido la primera opción en los planes de
'Zizou'.
El jugador, el único dueño de su futuro
Bajo esta tesitura es
James Rodríguez el que debe 'mover' pieza. Si algo tiene
Zinedine Zidane es que es un técnico generoso al que le gusta la 'meritocracia'. Si James entrena mejor que nunca y le demuestra en el día a día de Valdebebas que merece tener una oportunidad, la tendrá. Pero, si en cambio, prefiere empezar a escuchar las ofertas que ya le han empezado a llegar su futuro tendrá seguramente los meses contados en el
Real Madrid.De hecho,
ayer ya informamos en este medio que el club blanco no tiene intención de traspasar al colombiano en el próximo mes de enero. Sólo lo harían si el propio James lo pidiera expresamente. Algo que, por otra parte, tampoco se puede descartar, ya que no son pocos los clubes que andan tras sus servicios. Especialmente en
Italia, donde 'beben los vientos' por conseguir sus servicios. Conjuntos como la
Juventus o el
Inter ya han mostrado su interés e incluso emisarios de este último equipo intentaron verle anoche en
Lisboa.
Sin embargo, como decimos se quedaron con las ganas, porque el de
Cúcuta no tuvo ni un solo minuto. Aunque la verdad es que probablemente les haya importado poco, porque la calidad de
James está fuera de toda duda. Hoy por hoy no hace falta verle jugar para saber que es muy bueno, así que en el Real Madrid saben que siempre tendrán propuestas para traspasarle. Pero tanto
Zidane como el club quieren y desean que el futbolista dé un giro radical y demuestre todo el fútbol que tiene dentro. Para eso se le fichó hace ahora dos años y medio y para eso se le pidió que siguiera el pasado verano...
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