Con Bale lesionado y Cristiano Ronaldo y Benzema fuera de la convocatoria por decisión técnica, el Real Madrid afrontaba su primer encuentro sin ningún miembro de la BBC en dos años y medio. Lo hacía, además, con el mal recuerdo del último antecedente, en el mes de mayo de 2014.
Zinedine Zidane estaba en el banquillo aquel día como segundo entrenador de Ancelotti, y fue testigo de cómo el Real Madrid se despedía definitivamente de la Liga en Balaídos ante el Celta al perder por 2-0.
Carletto no alineó aquel día a ningún miembro de la BBC para reservar a los tres jugadores para la final de la Liga de Campeones, en especial a Cristiano y Benzema, que andaban tocados. A la postre fue una buena decisión, ya que el Madrid acabó levantando la Décima.
En esta ocasión, la idea de Zizou era dar descanso a Cristiano y Benzema de cara al Mundial de Clubes. Ninguno de los tres atacantes blancos estuvieron en el once, pero la sombra de aquella última derrota no sobrevoló el Bernabéu y los 'secundarios' demostraron que en este Madrid todos son protagonistas.
En esta ocasión, la idea de Zizou era dar descanso a Cristiano y Benzema de cara al Mundial de Clubes. Ninguno de los tres atacantes blancos estuvieron en el once, pero la sombra de aquella última derrota no sobrevoló el Bernabéu y los 'secundarios' demostraron que en este Madrid todos son protagonistas.
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