A decir de verdad, todo comenzó en Lisboa en 2014, cuando Sergio Ramos empató en el 93 y el Madrid terminó ganando la Décima en la prórroga gracias a los goles de Bale, Marcelo y Cristiano Ronaldo, pero en este 2016, los de Zidane se han hecho un ‘máster’ en finales apretados. Todo comenzó el 28 de mayo, en la final de Milán contra el Atlético de Madrid. Desde el punto de penalti, los merengues estuvieron finos, embocaron los cinco lanzamientos y aprovecharon el fallo de Juanfran para llevarse el título al Santiago Bernabéu.
En agosto, con el mundo mirando a los Juegos de Río y medio Madrid estaba de vacaciones, el campeón de Europa disputaba en Noruega la Supercopa de Europa contra el Sevilla. De nuevo, la resolución fue épica; Sergio Ramos mandaba el partido a la prórroga en el 92 y Carvajal daba la victoria a su equipo en el 119’ de encuentro con un soberano golazo tras un gran ‘slalom’.
Y para cerrar el año, cómo no podía ser de otra manera, nueva final de infarto para el madridismo. Enfrente estaba el Kashima Antlers en la finalísima del Mundial de Clubes, pero los ‘japos’ dieron más guerra de la esperada. Tanto es así que el choque se fue a la prórroga y al Madrid le costó Dios y ayuda resolverlo a su favor. En el tiempo extra apareció el mejor Cristiano para decidir. El Madrid se ha abonado al ‘infarto’ en 2016, para disfrute y sufrimiento de la parroquia madridista…
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