La felicidad y autorrealización es el culmen de toda existencia humana, encontrarla es un trabajo duro, pero conseguirla es la mayor de las satisfacciones. En el fútbol, la felicidad se traslada al campo y en el Real Madrid hay un jugador que vive una época de felicidad constante.
Se trata de Marcelo, el lateral izquierdo del Real Madrid está en su décima temporada con el club blanco y no podía estar en su mejor momento. Llego en el 2007 con 18 años procedente del Fluminense y a día de hoy es uno de los mejores laterales izquierdos del mundo. No fue un camino fácil para él, tenía la hercúlea tarea de hacer olvidar a un mito como Roberto Carlos, y ya ha conseguido que se le equipare a lo que Roberto hizo y fue en el Real Madrid.
Es pura fantasía y virtuosidad en la banda, lateral con un desborde como pocos y defensivamente infranqueable, el crecimiento de Marcelo ha sido estratosférico. Ha vivido con muchos entrenadores que o bien no querían que subiese la banda, o que le veían mas como enganche que como lateral o directamente no estaba entre sus preferencias para ser titular.
Esos tiempos pasaron y a día de hoy Marcelo es innegociable en el once de Zidane. Ahora en cada mercado de traspasos se intenta buscar un suplente para Marcelo. Y no es nada fácil, se trata de suplir al mejor lateral del mundo.
DEJA TU COMENTARIO