¿Por qué era tan especial este partido para el técnico blanco? Básicamente porque los andaluces eran el único equipo en España al que se había medido Zidane y no le había podido ganar desde que cogiera las riendas del primer equipo del Real Madrid.
Lógicamente, la trayectoria del francés en el banquillo madridista es de apenas un año, pero en ese espacio de tiempo ya había conseguido ganar a todos los equipos españoles que se le habían puesto por delante…menos al Málaga, que se escapó vivo la pasada campaña con el 1-1 del encuentro de La Rosaleda.
A buen seguro que Zidane, poco amigo de las emociones personales, no pensó en esta circunstancia a la hora de preparar el partido pero ahora, que ya sabe que ha conseguido vencer a todos los rivales españoles a los que se ha medido, seguro que le queda ese regusto especial del trabajo bien hecho. Los tres puntos de este sábado le van a saber a gloria.
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