El extremo galés se ha curado en un tiempo récord para tratarse de una importante luxación traumática en lso tendones peroneos de su tobillo derecho. De hecho, los primeros pronósticos hablaron incluso de cuatro meses de baja. En este sentido el medio que más se aventuró fue el diario 'As', el cual el pasado 1 de diciembre se atrevió a aventurar que el delantero en realidad iba a estar prácticamente cinco meses alejado de los terrenos de juego.
"La lesión de Bale se alarga: no volverá hasta el mes de abril" tituló por entonces el periodista Guillem Balagué, aludiendo a una información según la cual la intervención a la que se había sometido Bale había detectado una lesión mayor a la inicialmente prevista. Además, incluso en este artículo se calculaba en hasta 25 los partidos que el galés se iba a perder por culpa de su lesión de tobillo, lo que le descartaba también para disputar "los otavos de final de la Champions y 14 jornadas de LaLiga".
Pues bien, estamos a 17 de febrero y Gareth Bale ha sido convocado por Zinedine Zidane. Lo que significa que se ha recuperado en casi un mes y medio menos de lo que señalaba el citado medio madrileño a principios del mes de diciembre. 89 días en total que reflejan que su rehabilitación ha sido prácticamente perfecta y, lo que es más importante, que nunca se temió que el jugador tuviera que estar de baja hasta el mes de abril. Así que esta información fue simple y llanamente puro humo que tenía el único fin de infundir temor y dudas entre el madridismo.
Desde que Bale llegó al Real Madrid diversos medios han intentado dibujar un perfil suyo de jugador débil y frágil. Pero el delantero ha demostrado en esta recuperación que tiene una gran capacidad para superar los problemas físicos y regenerarse de sus lesiones. El problema que sufrió el 22 de noviembre en Lisboa no fue poca cosa e incluso se vio obligado a pasar por el quirófano para atajar de la forma más rápida posible su lesión en los tendones peroneos. Una decisión que con el tiempo se ha acabado por demostrar acertada, ya que los mejores pronósticos se han cumplido e incluso reducido en unos días.
Bale ya solo piensa en fútbol
Así que ahora, y para disgusto de 'As', Gareth Bale ya puede centrarse únicamente en el fútbol. El extremo es un jugador fundamental en los esquemas de Zidane y venía siendo uno de los hombres más en forma del equipo hasta que se produjo su percance en la Champions League. De esta forma, el equipo va a contar con un refuerzo de auténtico lujo para su ataque justo cuando la temporada se empieza a 'empinar' con partidos cada prácticamente tres días. Empezando por el del mañana ante el Espanyol y siguiendo por el del próximo miércoles en Mestalla.
En este sentido la intención de Zidane es que Bale se vaya reincorporando poco a poco a la dinámica del equipo. Tras tres meses ausente el francés no quiere forzarle demasiado en estos primeros partidos y probablemente le haga jugar en las segundas partes de los dos próximos chocos. De hecho, el principal objetivo del cuerpo técnico es que el '11' pueda estar ya a tope y sea titular el próximo 7 de marzo en el trascendental duelo de vuelta de los octavos de final de la Champions League.
Con su vuelta el equipo podrá recuperar su once tipo desde comienzo de temporada, el formado por Keylor Navas; Carvajal, Sergio Ramos, Varane, Marcelo; Casemiro, Kroos, Modric; Bale, Cristiano y Benzema. Hoy por hoy todos ellos están sanos - el capitán solo tiene una contusión en su cadera -, por lo que el Real Madrid está listo para seguir pujando fuerte por la Liga y para hacer un buen papel en tres semanas en la 'caldera' de San Paolo. Aunque eso sí, parece claro que a pesar de ello el míster seguirá con su política de rotaciones en los próximos partidos, toda vez que este viernes ha dejado fuera de su convocatoria a piezas clave como Keylor Navas, Modric o Karim Benzema.
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