Ante el Nápoles se vio la versión de aquel Ronaldo que maravillaba en el United. Durante todos estos años, Cristiano se había caracterizado, sobre todo, por ser un goleador implacable pero en esta edición de la Champions, los papeles se han cambiado. Benzema es el que mete los goles y Ronaldo el que da los pases decisivos. Ya suma cinco y es el segundo máximo asistente solamente por detrás de Neymar.
Los 90 minutos disputados contra los italianos demuestran que el Cristiano Ronaldo más ‘fino’ está de vuelta. El plan de trabajo y de descanso realizado durante las navidades le ha permitido llegar a los meses fuertes de la temporada en un gran estado de forma. Alejado de la punta del ataque contra el Nápoles, Ronaldo lució más que nunca en la banda derecha.
Desde ahí, hizo el jugadón que supuso el gol de Toni Kroos, como extremo derecho le puso una pelota de gol clara a Benzema y desde ahí volvió ‘loco’ a Ghoulam y Koulibaly los 90 minutos. Cristiano Ronaldo dio una sensación inmejorable. Estuvo más activo que nunca, atrevido y efectivo en el regate. No vio portería pero nadie echó de menos sus goles. Fue, sin duda, el mejor encuentro de Cristiano en toda la temporada.
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