Fue precisamente contra el Espanyol cuando Pepe fue expulsado por última vez a nivel de clubes. Corría la cuarta jornada de la temporada 2010-2011. El Madrid jugaba contra los ‘periquitos’ y el portugués era expulsado. Meses antes, había protagonizado aquel incidente con Casquero que pudo costarle algo más que una salida del Real Madrid.
Pero Kléper reaccionó, reflexionó y cambió radicalmente su manera de comportarse en el terreno de juego. Pese a que desde Barcelona se empeñen en vendérnoslo como un auténtico ‘asesino’ del fútbol, Pepe es un ejemplo de limpieza, de profesionalidad, de madridismo y de ganas de seguir triunfando con la camiseta del Real Madrid.
Hoy, contra el Espanyol, tendrá una nueva oportunidad de seguir demostrando su gran valía. Zidane no ha podido contar con él en los 2 últimos meses de competición. Varane, Ramos y Nacho han sostenido a la perfección al Madrid defensivamente pero el ‘3’ no se quiere bajar del barco. A final de temporada, su destino será el fútbol chino. 4 meses de fútbol le quedan en el Santiago Bernabéu en los que buscará dejarse el alma en cada partido.
DEJA TU COMENTARIO