El vestuario está motivado y el entrenador no piensa especular ni un ápice. Tiene en mente alinear el equipo de gala, con el regreso de Keylor a la portería, con la presencia de Carvajal, Casemiro, Kroos, Modric, Cristiano y Benzema en el equipo y con Isco que será el relevo del lesionado Gareth Bale en la punta del ataque.
Sin duda, Sergio Ramos está siendo uno de los hombres clave para que el equipo no caiga en la relajación antes del encuentro. El 1-2 puede incitar a pensar que la eliminatoria está completamente sentenciada y nada más lejos de la realidad: “El Bayern tiene grandes jugadores, si nos despistamos nos harán goles en cualquier momento. Tenemos que salir como si hubiéramos empatado”, ha recalcado el capitán en varias ocasiones.
El Real Madrid está a 90 minutos de plantarse en su séptima semifinal consecutiva en la Liga de Campeones. Sin duda, un auténtico logro que demostraría que el modelo de Florentino Pérez va por el buen camino. Pero todavía queda mucho trecho por delante y la plantilla lo sabe. Sin confianzas, el objetivo estará mucho más cerca ¡Hala Madrid!
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