La comparación con la que intentan 'echar' a Bale del Madrid

El Confidencial compara al galés con Arjen Robben y se pregunta por qué el Real Madrid no lo vende como al holandés.


Bale, gol, Espanyol

Gareth Bale




Lo que se supone que es una previa del encuentro entre el Real Madrid y el Bayern no es más que un ataque frontal contra Gareth Bale y contra Florentino Pérez, al que acusan de haber echado a Robben por sus lesiones y de no hacer lo mismo con el galés porque lo fichó él y no Ramón Calderón. Una barbaridad más de un medio que está empecinado en buscar siempre polémicas en el club blanco.

"Los resultados han acompañado y nadie en el palco se ha preocupado en demasía porque el cuerpo de Bale se lastime habitualmente ni porque, como dicen los que le conocen, su umbral del dolor sea especialmente bajo. El fichaje más caro de la historia del Madrid (y, por tanto, de Florentino Pérez) no se cuestiona. El de Robben, en cambio, sí", asegura este medio después de repasar los números de ambos futbolistas.

Las cifras les dejan en ridículo

Sin embargo, analizar las cifras parcialmente no ofrece una visión real de lo que pasó con Robben en su momento y de lo que sucede en la actualidad con Gareth Bale. El Confidencial intenta engañar a sus lectores con una visión parcial y subjetiva de las estadísticas de Robben y el galés. Pero la realidad es ésta: Robben sólo pudo jugar el 52% de los minutos en el tiempo que estuvo en el Madrid, mientras que Bale ha jugado el 68% y no todos los que se ha perdido han sido por lesión, en más de una ocasión no ha estado por decisión del entrenador, por lo que ha estado disponible en cerca de un 75% de encuentros.

Por lo tanto, Robben apenas jugaba 1 de cada 2 partidos por sus continuas lesiones en el Madrid, mientras que Bale ha estado disponible en 3 de cada 4 desde que llegó al Real Madrid. Una vez dicho esto, que cada cuál opine si es suficiente como para plantearse la venta del galés o no. Sea como sea, una vez más, el afán en intentar hacer daño al club blanco por parte de la 'canallesca' ha vuelto a ponerlos en su sitio. Ellos mismos se retratan.