Todo comenzó el pasado mes de febrero cuando Manolo García Quilón le comunicó al Atlético que Theo no renovaría con el club colchonero porque su único deseo era jugar en el Real Madrid. Gil Marín le ofrece ir al Barça, al Liverpool o al Bayern, pero la respuesta de Theo fue contundente: “solamente quiero jugar en el Madrid”. A esas alturas, en el Santiago Bernabéu ya tenían claro que abonarían la cláusula del lateral del Alavés.
Hace dos semanas, Real Madrid y Atlético hablaron por primera vez del hermano de Lucas. El Atleti instó a Florentino Pérez a pagar 30 millones de euros o bien a cerrar por las ‘malas’ la operación por 24 millones abonando el importe de la cláusula de rescisión. El Real Madrid, a estas horas, medita el procedimiento a seguir.
A partir del jueves, habrá negociaciones
El fichaje de Theo es seguro pero en el club blanco no quieren romper relaciones de manera definitiva con el Atlético y están dispuestos a negociar un traspaso. Eso sí, en ningún caso el Madrid se plegará ante las exigencias atléticas. Se pactará un precio justo pero si en las oficinas del Calderón se ponen ‘burros’, el Madrid pagará la cláusula y la historia se terminará por las bravas.
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