Es sin duda el mejor deportista español de todos los tiempos y como no podía ser de otra forma, es del Real Madrid. Siempre que tiene la ocasión, se deja caer por el Bernabéu para ser un aficionado más y vibrar con los goles del equipo de su corazón. Pero cuando las obligaciones de su trabajo se lo impiden, saca un hueco para poder seguir al equipo de Zidane.
Eso es lo que sucedió el pasado domingo, y es que tras conquistar por quinta vez en su carrera el Masters de Madrid, en esta ocasión ante el austriaco Thiem, Nadal decidió posponer unos minutos la rueda de prensa post partido para poder seguir los últimos minutos del partido entre el Real Madrid y el Sevilla. Un partido que sabía Nadal de la importancia y hasta que no vio como Cristiano y Toni Kroos sentenciaban el partido, la victoria y por tanto gran parte de la Liga, ya hicieron que el de Manacor saliera ante los medios para hablar sobre su triunfo en Madrid.
Sumando la felicidad que supone volver a ganar un trofeo en Madrid, ante una afición que idolatra a Nadal, con un juego imparable, ganando todos los títulos esta temporada en tierra batida y con la vista puesta en conseguir su décimo Roland Garros, hay que sumar la felicidad que supone ver a tu equipo ganar y seguir dando pasos para que de nuevo el Real Madrid levante un título. Es otro gesto más de un verdadero madridista como Rafa Nadal, que antepone todo al Real Madrid.
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