Zidane sabe que la mayor parte del trabajo está hecho, pero no quiere que sus jugadores se confíen y el Real Madrid pueda perder el título de Liga en la última jornada cuando solo hace falta un punto para ser campeones.
Si bien es verdad que los dos últimos precedentes en los que el Real Madrid se jugaba la Liga acabaron dando llevando el título a las vitrinas del Santiago Bernabéu, Zidane sabe que en las tres veces anteriores se acabó tropezando.
Zidane recuerda que en 1983 llegaba líder a la última jornada y acabó tropezando para darle el título al Athletic, mientras que en 1992 y 1993 se dieron las fatídicas Ligas de Tenerife.
Esos fantasmas se espantaron en 2003 y 2007, cuando el Real Madrid llegó con la ventaja a la última jornada ante Real Sociedad y Barcelona, respectivamente, y el título se quedó en la capital de España.
Sin embargo, Zidane es precavido y quiere que sus hombres estén alerta el domingo en Málaga para no tener que vivir otro suplicio como los que se vivieron hace más de dos y tres décadas.
El Real Madrid debe salir alerta al césped de La Rosaleda para no pegarse un golpe que arruinaría todo el trabajo que se ha hecho durante las 37 jornadas que ya se han disputado y así poder celebrar una nueva Liga blanca.
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