El caso es que al recordar aquella final entre madridistas y juventinos del año 1998 era interesante conocer la opinión de alguno de los colegiados que pitó aquel encuentro.
Christian Schraer fue uno de los jueces de línea de aquel partido en Ámsterdam y se ha encargado de volver a ridiculizar las quejas de Alves.
"Para mí, como línea, fue mi primera final, una gran final con dos de los equipos más grandes de Europa y en un escenario excelente. Fue mi compañero Bastian quien estaba en ese lado y en aquel momento en el estadio no hubo ninguna discusión al respecto. Luego, mirando la televisión, es muy fácil criticar", afirmó en Marca. Lo dicho, Alves, ¡sigue llorando como buen segundón que eres!
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