Primero cayó Manuel Neuer, la más ‘fea’ de todas. Con dos exhibiciones ante el alemán acalló a todos sus críticos. Primero en Múnich dónde poco más pudo hacer el guardameta germano que salvó un ocho a su equipo. Ahí el crack portugués mostró un espectacular rendimiento, aunque fue en la vuelta cuando clasificó a su equipo en un partido de ensueño en el que dejaban atrás a uno de los grandes favoritos para ganar la Champions.
Posteriormente fue Jan Oblak en el Santiago Bernabéu. El esloveno sufrió en sus ‘carnes’ al astro luso en una exhibición futbolística. El Atlético de Madrid se llevó un carro de goles (hath-trick) del hombre que no aparecía en las grandes citas. Notése la ironia… Él solo le endosó 3 a la defensa más férrea y dura del continente (con permiso de la Juventus).
El equipo bianconeri, precisamente, fue su siguiente víctima. Como si se tratase del ‘jefe final’ para acabar con éxito el año, la Juventus de Turín y Gianluigi Buffon, eran la última piedra para alcanzar un doblete de ensueño. El portero italiano sufrió con un doblete del astro de Madeira que certificaba el doblete del mejor equipo de la historia definitivamente e impregna en el próximo Balón de Oro su nombre. Un nombre para la historia: Don Cristiano Ronaldo Dos Santos Aveiro.
DEJA TU COMENTARIO