Descubrimos el lado más personal de Modric

El croata habla de sus inicios en el fútbol en su ciudad natal, Zadar, con testimonios que nadie conoce


Montaje Luka Modric y Real Madrid

Montaje Luka Modric y Real Madrid




Para muchos la ciudad de Zadar no les es para nada conocida, pueblo costero de Croacia que cuenta con 70.000 habitantes pero donde se forjó a uno de los grandes jugadores del mundo y va camino de ser el mejor jugador croata de la historia. Luka Modric creció y dio sus primeros pasos como futbolista en Zadar, pero su historia no es la de un niño cualquiera.

Con los compañeros del diario MARCA ha repasado varios momentos de sus inicios, los cuáles los pasó en un parking de un hotel cuando era un refugiado de la Guerra de los Balcanes: "Tuve una vida como cada niño, divertida, con amigos, jugando al fútbol siempre, enfrente de donde vivía. A pesar de todo lo que hemos pasado en Croacia, yo no tengo malos recuerdos, disfrutaba como cada niño y no me daba mucha cuenta". Luka fichó por el modesto NK Zadar donde permaneció siete años, entrenaba en el complejo Visnjik, un centro deportivo con campos de fútbol, baloncesto, tenis etc. Más tarde, el que considera su padre deportivo, Tomislav Basic, recomendó su fichaje por el Dinamo de Zagreb: "Basic para mí es mi padre deportivo. Aparte de mi familia, mis padres y gente cerca de mí, él era uno de los únicos que siempre creyó en mí".

Actualmente su club natal el Zadar no atraviesa el mejor de los momentos, aunque como bien reconoce Modric, el deporte más popular es el baloncesto. En Dalmacia han salido grandes mitos del baloncesto como Petrovic, Kukoc e incluso el propio Modric confiesa que a él también le gusta el deporte de la canasta: "Más allá del fútbol yo jugaba al baloncesto, me gusta mucho, muchísimo. Cada año cuando volvía de vacaciones iba a jugar con mis amigos, y eso era la guerra".