Pintus fue una petición expresa de Zidane cuando llegó al banquillo del Real Madrid y su trabajo ha dado unos grandísimos resultados, solo hay que ver cómo han llegado los futbolistas al final de la temporada.
Se habla mucho de las rotaciones de Zidane, pero no tendrían éxito si todos los jugadores no estuviesen al máximo nivel de su capacidad física para afrontar todos los partidos al cien por cien, desde el primero al último minuto.
Es ahí donde aflora el trabajo de Pintus, que diseña una preparación física específica para cada jugador de una manera que combine perfectamente con la del resto de compañeros y así siempre estén capacitados para jugar cualquier partido.
Hay otros preparadores físicos más mediáticos y que acaparan espacio en los medios de comunicación con su manera de exigir a los jugadores, pero Pintus es más calmado, aunque igual de exigente con los futbolistas del Real Madrid.
Y es que un preparador físico tiene que ser exigente y enérgico para que los jugadores se empapen de esa manera de ser y lo den todo en cada entrenamiento para poder reflejar el trabajo cuando llegan los partidos.
Con Pintus el Real Madrid se asegura una estrella junto a Zidane y los jugadores para controlar una faceta que cada día es más importante en el mundo del fútbol.
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