El Mónaco se está tomando muy en serio la idea de proteger a Mbappé, casi como si fuera una estrella de la música, el club del Principado le ha puesto una persona de confianza que lo acompaña en todo momento. El jugador sigue concentrado con el equipo a expensas de jugar un partido de pretemporada contra el Stoke City.
El mensaje es claro: evitar que Mbappé viva situaciones incómodas y comprometidas. Por esta razón ni la prensa ni los aficionados pueden acceder a él. En el caso de los seguidores, siempre y cuando tengan buenas intenciones, el jugador les firmará y sacará fotos, pero ya se demostró que por ejemplo el jugador rechazó firmar una camiseta del Real Madrid con el nombre de Bale. Desde el club no quieren que pueda decir nada de nada sobre su futuro ni cualquier tema, saben que sus palabras son medidas al milímetro y ante eso quieren evitarse problemas con un vigilante continuo.
Por su parte Mbappé sigue a lo suyo, se entrena a las órdenes de Jardim, sólo atiende a aquellos aficionados del Mónaco, no quiere interactuar con nada del Real Madrid aunque también es cierto que hace poco reconoció que no se ve jugando en el Mónaco para siempre. El culebrón Mbappé sigue su curso y parece que ahora se ponen más meticulosos con el jugador.
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