Parece imposible que el hecho de invertir menos dinero en fichajes y atravesar una época gloriosa levantando títulos pueda ir de la mano. Sin embargo, el Real Madrid ha encontrado una fórmula secreta con la que hacer magia porque es precisamente lo que está consiguiendo en estos últimos tiempos.
Atrás parecen haber quedado aquellos desembolsos multimillonarios para fichar a ‘galácticos’ y ahora el Real Madrid prefiere centrarse en adquirir jóvenes valores con una gran proyección de futuro, que se encuentran irrumpiendo en el fútbol con fuerza, para gastarse menos y amortizar así mucho más la inversión. Los blancos han demostrado ser más listos que ningún otro club europeo en estos últimos años y la vista de todo el mundo está el rendimiento que está ofreciendo un equipo que no se cansa de levantar un título tras otro.
James, el último fichaje caro
Tanto han cambiado las cosas en las oficinas del Bernabéu que el último traspaso desorbitado fue el que se realizó por James Rodríguez, procedente del Mónaco y habiendo hecho un Mundial espectacular, en el año 2014. Por él se pagaron 75 millones de euros, una cifra que los blancos no han vuelto a rozar ni por asomo.
Desde entonces, todo queda dicho al apuntar que el fichaje más caro hasta el momento ha sido el de Danilo por 30,5 kilos. Kovacic, por otros 30 millones, la misma cifra que se pagó por Morata o también por Theo, han sido los traspasos más altos realizados por el Real Madrid desde aquella temporada 2014/2015.
Mientras tanto se han realizado ventas como las de Morata por 80 millones, Danilo por 30 o Illarramendi por 15 que han ido generando un superávit en las cuentas blancas imposible para otros equipos. Un superávit que no ha mermado el rendimiento deportivo, sino todo lo contrario.
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