No por ser esperado el 'robo' del Wanda dolió menos

El vestuario estaba avisado... pero aún así no pudo evitar que le escamotearan el triunfo


Nacho vio la amarilla ante el Atlético de Madrid

Nacho vio la amarilla ante el Atlético de Madrid




El Real Madrid estaba avisado. Los jugadores conocen bien a Fernández Borbalán y saben que es uno de los colegiados más nefastos para el club blanco. ¿El motivo? No se sabe, aunque el dicho dice 'piensa mal y acertarás'. Y es que en el club existe la sensación de que no puede ser casualidad tanto error de un mismo árbitro y casi siempre en la misma dirección. De hecho, sus estadísticas en partidos del Real Madrid así lo reflejan, porque los blancos solo han ganado el 56 % de los encuentros que este hombre les ha dirigido en las tres competiciones nacionales, empatando el 23 % y perdiendo el 21 % restante.

Se trata de unos datos sorprendentes si se tiene en cuenta que el Real Madrid es un club acostumbrado a ganar el 75 % u 80 % de los partidos que juega. Los porcentajes son sorprendente bajos, pero al ver lo que ocurrió en varios de estos choques uno entiende bien por qué le cuesta tanto al equipo blanco ganar los partidos en los que Borbalán imparte su justicia. De hecho, no hay más que repasar lo ocurrido en el Wanda Metropolitano, con hasta 3 penaltis y dos rojas del Atlético que se le escamotearon al actual campeón de Liga y de Champions League.

Por eso, dos días después del partido, tanto jugadores como técnicos y directivos están que 'trinan' con el arbitraje del partido. Según 'Marca' incluso lo que más molestó no fueron los errores en sí, sino la actitud de prepotencia y superioridad del colegiado durante y al término del choque. Su actitud fue de tomarse a broma sus terribles errores, como si con él no fuera la cosa. Incluso llegó a reírse cuando los futbolistas merengues le intentaron hacer ver que su actuación había sido absolutamente nefasta.

Además, en el club tampoco se escapa que Borbalán ya dirigió otro partido clave de esta temporada (¿casualidad?), el Real Madrid-Valencia. Y ese día se le reclamó un claro penalti de Parejo sobre Benzema. Luego el partido acabó 2-2, por lo que si el trencilla hubiera hecho bien su trabajo los blancos podrían haber sumado dos puntos más. Justo los que se dejaron en el Wanda, de forma que con esos cuatro puntos ahora la distancia podría haber sido de 'solo' 6 con el Barcelona. Un detalle este que a la larga puede marcar la diferencia entre ganar o no ganar la Liga.