El Real Madrid logró el triunfo en Bilbao en una fecha bastante 'merengue'.
El Real Madrid se presentaba en Bilbao conociendo ya los resultados de dos de sus máximos rivales en la pelea por la Liga. El Barcelona había patinado ante el Celta dejándose dos puntos con su empate en el Camp Nou mientras que el Atlético había ganado, por los pelos, a la Real Sociedad con un gol de Griezmann en los últimos minutos.
Por tanto, los de Zidane sabían que la jornada les podía sonreír después del pinchazo culé. Eso sí, para ello debían imponerse a un herido Athletic de Bilbao en el estadio de San Mamés, uno de los feudos más complicados de la competición española.
Eso sí, el Madrid contaba con un factor talismán para la visita a Bilbao, sus antecedentes en partidos de Liga disputados un día 2 de diciembre, bastante favorables históricamente para los intereses del conjunto madridista.
De hecho, el Madrid jugaba en San Mamés su partido de Liga número 10 en 2 de diciembre. En los anteriores nueve encuentros los blancos se habían llevado la victoria en seis ocasiones, empataron uno y perdieron los dos restantes.
Números positivos que hacían pensar que el azar también estaría del lado de los de Zidane en esta ocasión. Pero, el empate final del cuadro blanco ante el Athletic no confirmó el talismán merengue en los días 2 de diciembre ¡El Madrid no pudo ser fiel a la tradición en esta ocasión!
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