Hace un tiempo, el mero hecho de enfrentarse al Borussia Dortmund en Champions era un auténtico dolor de cabeza. Afortunadamente los tiempos cambian y ahora las tornas han cambiado de manera radical.
El Real Madrid tiene en el conjunto alemán uno de sus rivales fetiche y es que los últimos enfrentamientos entre ambos no lo han podido dejar más claro. Con la victoria de esta noche por 3-2, el equipo blanco ha completado los dos duelos directos ante los alemanes con victoria, a diferencia de los enfrentamientos la temporada pasada.
En aquella ocasión no se pasó del empate tanto en Alemania como en Madrid, el equipo terminó por ganar la Champions y demostrando que el Dortmund ha pasado de ser una bestia negra, a un corderito. Un doblete de victorias que ha vuelto a confirmar que este equipo ha pasado página y ya ve al Borussia como una sombra de lo que fue.
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