El PSG monta su defensa ante el plan de ataque del Madrid por Neymar

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El diario 'Marca' desvelaba este viernes que Florentino Pérez ya ha señalado a Neymar como su 'galáctico' favorito para la próxima temporada. Y este mismo periódico asegura también que en París ya han adoptado una táctica de cara a los sucesos que pueden tener lugar en los próximos meses. La relación entre el Real Madrid y el PSG es realmente buena, ya que sus presidentes (Florentino y Nasser Al-Khelaifi) son casi amigos personales. Pero eso no quiere decir que en el Parque de los Príncipes le vayan a poner la alfombra roja al actual campeón de Europa.

Más bien todo lo contrario. Porque si el PSG fichó el pasado verano a Neymar por 222 millones de euros y le convirtió en el jugador más caro de la historia fue para que se convirtiera en su hombre franquicia. Su intención era construir por fin un proyecto ganador, y ahora no está dispuesto a deshacer el trabajo a medias. Con el brasileño, Cavani y Mbappé han construido el tridente ofensivo más temible del planeta y no quieren tocarlo por nada del mundo. Ni siquiera aunque el mejor equipo del mundo llame a su puerta para ofrecerle otro dineral por su mayor estrella.

Así que la directiva del PSG "ni se inmuta" ante el acercamiento del Real Madrid. No se plantean su adiós a corto plazo. Ven a Neymar como un futbolista clave tanto en lo deportivo como en lo institucional, por lo que no le consideran transferible. Quieren retenerle y que cumpla su contrato como sea porque entienden que consiguiéndole le mandarán un mensaje a todo el mundo en el que dejarán claro que van totalmente en serio. No se consideran un club 'puente' y pretenden demostrar que pueden contar con los mejores en proyectos estables.

De ahí que la tarea se le presente complicada al Real Madrid. Además, en París las cláusulas de rescisión no tienen validez, por lo que la única vía para completar el fichaje de Neymar sería una negociación. Y para que esta se diese el 'crack' tendría que mojarse y apretarle las 'tuercas' a los suyos. Es decir, pedir expresamente su salida de París y hacer pública su intención de recalar en la capital de España. Algo que ya hizo hace unos meses con el Barcelona, pero que no parece sencillo que se repita estos días... Por eso si en el Santiago Bernabéu quieren de verdad llevar a cabo esta histórica operación van a tener que coger el pico y la pala y armarse de paciencia, mucha paciencia.