Pero lo que parecía una locura terminó siendo un enorme acierto. Kovacic volvió a ser el Mateo que brilló en la Supercopa. El croata llevaba varios meses por debajo de su nivel pero en París dio un clínic de manejo del espacio y el tiempo por delante de la defensa. Estuvo perfecto en defensa y apenas cometió errores con la pelota cuando le tocó dirigir la orquesta.
Si a Zidane le salió bien lo de Kovacic, qué decir de la apuesta por Lucas y Asensio. Los dos españoles fueron lo mejor del equipo. Entre los dos, volvieron loca a la defensa local, armaron la jugada del primer gol y ayudaron de manera constante a los laterales madridistas. Con ellos dos, Carvajal y Lucas sufrieron la mitad de la mitad.
A Zidane se le abre una disyuntiva para los próximos encuentros y, sobre todo, para la próxima eliminatoria europea. Lucas y Asensio se han ganado el derecho a seguir siendo titulares pero Kroos, Modric y Casemiro continúan siendo indiscutibles ¿Qué hará Zidane para que los dos sigan entrando en el once inicial? El Madrid encontró tres nuevo ‘fichajes’ en el Parque de los Príncipes…
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