Ojo al dineral que costará ver las semifinales de Champions

De los cuatro equipos participantes, el Real Madrid es el club que vende las entradas más caras, el Bayern, las más baratas


Champions, Precios

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El público del Real Madrid es un público fiel y el más exigente del mundo, tienen todo el derecho del mundo a serlo, por algo son los que más dinero pagan para ver a sus ídolos y en Champions eso se multiplica. Con la llegada de las semifinales, a la hora de hacer comparativas, el conjunto blanco es quién más caro vende sus entradas.

De los cuatro semifinalistas, el Real Madrid-Bayern del próxima 1 de mayo tendrá los precios más altos de toda esta edición de la Champions (por encima de la final). La entrada más 'barata' oscilará en torno a lo 90 euros en el cuarto anfiteatro y 360 en tribuna. Para la afición rival los precios se moverán alrededor también de los 90 y 130 euros, más caro que la propia final en Kiev, cuya localidad más barata costará 70 euros, eso sí, el precio más caro a pagar serán unos 450 euros aunque se puede llegar a entender siendo una final. Siguiendo con la eliminatoria entre alemanes y españoles, ir a ver el partido al Allianz Arena del próximo miércoles tendrá un coste entre 40 y 150 euros, mucho más barato que el Bernabéu.

En lo que se refiere a la otra semifinal entre Roma y Liverpool, la entrada más barata para ir a ver el partido a Anfield costará unas 37 libras (casi 43 euros), mientras la más cara se quedará en 59 libras (casi 68 euros). Por su parte la Roma tiene un abanico de precios para su partido en el Olímpico de entre 65 y 200 euros sin contar con los descuentos a sus socios, característica que comparte con los demás equipos. El Bernabéu siempre es más caro, la calidad del partido y la importancia del mismo son factores que todo el mundo sabe y además acepta a pagar para algo que sólo se puede vivir una vez en la vida.


¿Habrá encerrona con el árbitro del Bayern-Real Madrid?

Aún no se conoce quién será el encargado de arbitrar el partido entre Bayern y Real Madrid, pero desde luego el elegido tendrá una cantidad de presión pocas veces vista. Y es que tras lo que ocurrió con la Juventus, cualquier decisión que tome en el partido será mirada con lupa.

Es por eso que desde el Real Madrid al menos se intenta liberar de presión al colegiado, ya que tratará de hacerlo lo mejor posible (como hizo ante la Juve), pero en la afición hay una sensación extraña. Los hay que piensan que sí podría estar condicionado por todo lo que se ha dicho en estos días acerca del beneficio al Madrid (pura mentira), la campaña de antimadridismo que ha aflorado en algunos rincones de la sociedad les delata y desde luego, el árbitro tendrá muy en cuenta cada decisión que tome en el partido. No obstante, ya sea con el colegiado en contra, el aficionado blanco está convencido de que el equipo pasará por encima de un Bayern al que le tienen tomada la medida.

Por otro lado, los hay que opinan que no irá condicionado y es que en un ejercicio de personalidad del propio árbitro, el hecho de abstraerse de toda la mentira que ha ido saliendo en los últimos días, le puede hacer pitar el partido con la mayor de las tranquilidades. Sí está convencido de lo que tiene que hacer, hará un buen partido, si deja que el partido se le vaya de las manos, entonces ahí tendrá un problema.