Entre los cánticos más habituales se escuchó el ya habitual “Puta Real Madrid”, “Písalo, Písalo” cuando Cristiano Ronaldo cayó lesionado por un pisotón de Gerard Piqué, gritos ofensivos contra España y hasta cánticos racistas contra el brasileño del Real Madrid Marcelo Vieira. Sergio Ramos también fue increpado de manera lamentable desde la grada barcelonista.
La mayoría de estos insultos provenían de la Grada D’Animació culé que la propia directiva azulgrana creó tras la expulsión de los Boixos Nois. Sin embargo, en ella, sigue existiendo un grupo de impresentables que están más pendientes de insultar al rival que de animar a su equipo y de disfrutar del fútbol.
La sanción podría consistir en una fuerte multa económica o incluso en el cierre parcial de una parte del estadio barcelonista si así lo considera oportuno la Liga de Fútbol Profesional. Suponemos que a Michael Robinson le sigue pareciendo mucho peor la grada Fans del Madrid que los agradables y amables ultras que habitan el fondo del Camp Nou.
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