Corría el minuto 30 de partido cuando las caras de los madridistas encogían al ver a Dani Carvajal tendido en el terreno de juego con grandes gestos de dolor y con lágrimas en sus ojos. Se acababa de terminar la final para él. Un Carvajal que se había preparado para llegar en perfectas condiciones a esta final y que de nuevo tenia que irse antes de tiempo.
En una jugada con Henderson, Carvajal cargó demasiado en su isquiotibial derecho y cayó el césped rompiendo de dolor y a llorar. Intentó continuar pero sabía que su partido se había terminado en ese momento y de nuevo sus lágrimas hicieron recordar a aquellas lágrimas que en la final de Milán en 2016 volvieron a aparecer. En aquella ocasión, Carvajal se perdió el partido y posteriormente le haría estar fuera de la Eurocopa de Francia. Una situación que desde luego vuelve a dejar a Carvajal en serias dudas sobre si podrá estar o no en Rusia en el que sería su primer Mundial.
Nada podía consolar a un Carvajal que estuvo en las manos de los médicos nada más salir y en una primera exploración han confirmado que sufre un problema muscular en el isquio derecho. Queda por ver todavía cuál será su período de recuperación pero desde luego, el desconsuelo de Carvajal fue tremendo.
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