Presidente, jugadores, ¿ahora qué hacemos con Julen?

El Real Madrid lleva cinco partidos sin ganar y el domingo visita el Camp Nou, ¿es el momento de despedir al entrenador vasco?


Lopetegui

Lopetegui




El preparador vasco está en el alambre. La Supercopa de Europa, ya muy lejana, pero los cinco partidos sin ganar, el récord histórico de minutos sin ver puerta, la mala imagen que transmite el equipo y la impaciencia del Santiago Bernabéu pueden precipitar los acontecimientos. Aunque la culpa no es solo del entrenador, pero siempre el huracán de la crítica se centra en su persona.

El Levante ha sido el último quebradero de cabeza de Lopetegui. Pero como ya hemos dicho, el vasco no está teniendo suerte. Sus pupilos firmaron 34 rematestres a los postes-, el portero granota Oier Olazábal hizo uno de los mejores partidos de su carrera, el VAR le pitó un penalti y le quitó dos goles –ilegales, eso sí-, el Bernabéu animó hasta que explotó. Definitivamente, el Real Madrid no tuvo suerte.

Pese  que no tuvo fortuna, el futuro del vaso pende de un hilo. Él ha apuntado que es “lo último” en lo que piensa pero en las altas esferas de Concha Espina sí se piensa y se analiza mucho. La cercanía del ‘Clásico’ (este domingo) podría significar la última bala para Lopetegui –sin olvidar el duelo ante el Viktoria Plzen de este martes en el Bernabéu-. El momento es muy delicado.

Los jugadores han demostrado que están con su entrenador. Marcelo e Isco –este último fue sustituido a la hora de partido- se dejaron el alma después de estar casi un mes de baja. El brasileño, de hecho, metió el gol que frenaba la peor sequía goleadora de la historia y acabó con calambres. Desde el banquillo, Ceballos y Benzema salieron con hambre, independientemente de que no fuesen titulares –Vinicius se quedó en la grada-. Todos quisieron y lo intentaron, pero no pudieron.


El Real Madrid es quinto después de nueve jornadas y podría acabar el fin de semana fuera de los puestos de Europa. El momento es tenso y delicado. Es el momento de reflexionar y, quizás, tomar decisiones si se considera que es el momento apropiado. Lopetegui está más en el alambre que nunca y hay que estar pendientes las próximas horas.