El colegiado del comité vasco fue el absoluto protagonista (en negativo) del encuentro entre los de Chamartín y el conjunto rayista. Varias faltas -muchas veces al límite de la expulsión- de los futbolistas del equipo de Míchel sobre los jugadores blancos no fueron pitadas por De Burgos Bengoetxea, que actuó sin sentido de la justicia, totalmente ajeno a la característica principal que tendría que poseer un árbitro, es decir la imparcialidad.
Sin embargo, el peor 'atraco' del colegiado al Real Madrid llegó en la primera parte de juego. En el minuto 38, Lucas Vázquez fue empujado dentro del área adversaria por Álex Moreno. Todo el Santiago Bernabéu recriminó la clara falta del jugador del Rayo, pero sin ni siquiera haber consultado el VAR, el árbitro puso el balón en juego. Conclusión: no pitó nada.
El segundo tiempo
En el segundo tiempo, hubo otra jugada polémica que involucró a De Burgos Bengoetxea. En el minuto 65 el capitán de los blancos, Sergio Ramos, consiguió marcar con un cabezazo tras un centro de Toni Kroos en una acción a balón parado. Sin embargo el árbitro, a pesar de que el camero sí que estuvo adelantado (aunque solo de unos pocos centímetros), ni siquiera esta vez se tomó la molestia de consultar el VAR para despejar cualquier duda al respecto.
Y para colmo, la última 'jugada' del colegiado vasco fue no revisar con la tecnología una posible mano de un jugador del Rayo que interrumpió una maravillosa jugada entre Vinicius y Lucas Vázquez en los últimos instantes del partido. De Burgos Bengoetxea, ¡ya estamos hartos de tu antimadrisimo!
A continuación, el penalti sobre Lucas Vázquez que no pitó el árbitro:
PIDE PENALTI LUCAS por esta CAÍDA dentro del área. Minuto 38.
— El Chiringuito TV (@elchiringuitotv) 15 dicembre 2018
Real Madrid 1-0 Rayo #LaLiga pic.twitter.com/93MktAzcap
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