El conjunto culé anoche volvió a ganar en la Champions de forma muy polémica
Anoche el Barcelona consiguió ganar ante el Manchester United en Old Trafford (0-1) la ida de los cuartos de final de la Champions League. Y lo hizo, como suele ser habitual, gracias a acciones polémicas, teatro, y un gol dudoso concedido por el VAR, como pasó en el caso de la ventaja que regaló la victoria final a los culés.
Respecto a las otras acciones polémicas, que Sergio Busquets en el minuto 50 cortó con el brazo un centro de McTominay que iba al área del Barcelona. El árbitro del encuentro, el italiano Gianluca Rocchi, no lo vio y no cobró ni siquiera falta, pero era infracción y claramente tarjeta amarilla. Hay que destacar que el mediocentro azulgrana estaba amonestado desde la primera parte, por lo que tenía que ser también expulsado.
No solo Busquets, también Jordi Alba fue autor de otro espectáculo patético.El lateral izquierdo, en el intento fallado de llegar a controlar un balón, chocó voluntariamente contra Young y unos segundo después se tiró al suelo simulando una falta del futbolista del Manchester United.
Pero aún faltaba más. En su teatro habitual, tratando de simular faltas que no son, Luis Suárez se tiró al suelo, llevándose las manos a la cabeza, después de que presuntamente fuera arrollado por detrás por Chris Smalling. El charrúa exageró nuevamente, y para colmo, se quejó sin ver la amarilla por fingir una presunta falta. ¡Todo muy lamentable!
A continuación, lo que hizo ayer el Barcelona:
UNA MÁS DE SERGIO BUSQUETS#ChampionsxFOX La mano que no le sancionaron al mediocampista del Barcelona pic.twitter.com/WvqnGi1pJD
— FOX Sports MX (@FOXSportsMX) 10 de abril de 2019
Embarrassing dive by @JordiAlba 😂😂😂 pic.twitter.com/XYyqyibl2H
— ForzaFerrari (@ForzaFerrari15) 10 de abril de 2019
Es lamentable. pic.twitter.com/rglOcI0F3c
— Ramón Álvarez de Mon (@Ramon_AlvarezMM) 10 de abril de 2019
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