No parecía que fuera a tener tiempo suficiente para lucirse en el campo, pues entró en el minuto 74 por un fatigado
Lucas Vázquez. Sin embargo, aún tuvo tiempo de dejar detalles de su calidad, demostrando que esta no se había perdido con la lesión.
(Zidane ya adelantó su presencia en este partido en rueda de prensa)Intentó marcharse en carrera en su primera intervención pero el defensor del
Villarreal le salió bien al paso. El siguiente balón que tocó sería dentro del área: controló y armó la pierna rápido para disparar a puerta, pero
Andrés Fernández le negaría el gol. No sería el único disparo que ensayaría, aunque el otro se marcharía bastante alto.
Caído a la banda es donde más cómodo se le ve y el partido de hoy no fue una excepción. Tuvo dos buenas arrancadas que casi acaban en algo más: en ambas realizó buenos recortes y sacó un buen pase atrás con el que casi conecta con un compañero.
Vinicius está de vuelta y ha venido para quedarse. Su descaro y capacidad para encarar volvió a arrancar el aplauso de los casi 50.000 aficionados que se dieron cita en el
Bernabéu, pero cuando realmente puso al estadio en pie fue con una
"espaldinha" marca de la casa.
Vinicius ilusiona mucho para la temporada que viene, y a día de hoy es junto con
Brahim de los jugadores que más verticalidad le imprime al juego.