Sus últimos escándalos fuera de los terrenos de juego le alejan cada vez más del Bernabéu.
Hubo un momento, hace no mucho tiempo, en el que había ciertas dudas en el Real Madrid a la hora de ‘elegir’ entre Neymar y Mbappé. El primero estaba más hecho, teóricamente más preparado para los grandes retos, mientras que el francés era una ‘imberbe’ aparición con buenísima pinta, pero sin un pasado que pudiera refrendar su condición de crack.
Ahora, todo eso ha cambiado. En el Bernabéu cada vez tienen más claro que Neymar ya no va a romper en el súper crack que apuntaba por diversas razones, fundamentalmente por sus continuos problemas físicos, pero también por todos los problemas extradeportivos que vienen rodeando su vida de un tiempo a esta parte (Vinicius desvela los secretos de Neymar…y su mote)
Los últimos acontecimientos teniendo que ir a declarar a un juzgado en silla de ruedas, el lío abierto con la mujer que le acusa de violación, sus supuestos enfrentamientos con compañeros y entrenadores en el PSG han sido razones más que suficientes para que el Madrid haya terminado por darle la espalda. En el Bernabéu no sólo se tiene que jugar bien al fútbol sino dar una imagen apropiada fuera del campo y Neymar no lo está haciendo. Por eso, su nombre cada vez desciende más posiciones entre las preferencias del club…en favor de su compañero y enemigo, Mbappé.
Neymar estaba llamado a ser el gran dominador del planeta fútbol tras la época dorada de Cristiano y Messi, sin embargo, los años pasan y cada vez está más lejos de la corona mundial. Es más, jugadores como Hazard o Mbappé ya le han superado de forma clara. El Madrid ha contratado al belga y sueña con el francés, dejando claramente de lado el deseo por el que un día fue la gran esperanza de Florentino. A día de hoy, salvo giro bestial, en el Bernabéu ya han tachado el nombre de Neymar como posible refuerzo para los blancos. Demasiado ruido mediático…y muy poco futbolístico para lo que se esperaba de él.
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