El galés pasó prácticamente inadvertido en la derrota de su Selección ante Hungría (1-0) en la fase de clasificación para la Eurocopa 2020 y lleva tres meses sin marcar
Gareth Bale sigue sin levantar cabeza. El atacante del Real Madrid, tras haber puesto fin a su temporada y quién sabe si a su etapa en el club blanco con tres meses sin ver puerta -desde el 16 de marzo ante el Celta, ha acudido a la llamada de Ryan Giggs para los duelos de la Selección de Gales ante Croacia y Hungría de la fase de clasificación el grupo E para la Eurocopa 2020. El resultado no ha podido ser peor. La única nota positiva es que no se ha lesionado.
El delantero galés está acostumbrado a jugar en el Madrid partiendo desde un costado, pero Giggs, como ya ha pasado en otras ocasiones, lo utiliza como ‘9’ y Bale ahí no encuentra su sitio. Apenas tuvo incidencia en el juego ante Croacia del sábado -lo mejor fue un saque de banda en largo- y tampoco la ha tenido Hungría. (¡Rooney complica el fichaje de Bale por el Manchester!)
El duelo, por todo lo que había en juego, ha estado muy igualado, pero las mejores ocasiones llevaban la firma de los húngaros, más concretamente de Szalai -solo Bale inquietó antes del descanso, quedándose a centímetros de hacer el 0-1-. El exdelantero del Castilla ha sido un quebradero de cabeza constante para la defensa galesa, pero no logró materializar sus llegadas. Patkai, a falta de 10 minutos sí lo hizo, y Gales apenas tuvo tiempo para la reacción.
Gales se queda como cuarta de grupo con solo 3 puntos, a 6 de la líder Hungría y 3 de Eslovaquia y Croacia, respectivamente, y solo se clasifican las dos primeras. Bale sigue sin levantar cabeza y ahora le tocará decidir su futuro porque Zinedine Zidane no cuenta con él de cara a la próxima temporada. Un pozo sin fondo.
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