El francés del United tiene especial ilusión por ser compañero de Modric en el centro del campo, actual Balón de Oro, que puede aconsejarle y ayudarle en su llegada
Paul Pogba es una de las piezas más codiciadas del mercado y dos transatlánticos europeos, el Real Madrid y la Juventus, lo quieren a toda costa. El club blanco, por petición expresa de Zinedine Zidane, y el ‘bianconero’, con el objetivo de traerle de vuelta a Turín tres temporadas después, ya han comenzado a mover ficha, pero el Manchester United no lo pondrá nada fácil con el ‘pastizal’ que exige.
Independientemente de que en Italia hayan asegurado que el centrocampista francés le ha dado el ‘sí’ a Sarri, desde Defensa Central os podemos confirmar que Pogba quiere salir de Old Trafford y poner rumbo al Madrid -la Juventus sería su segunda opción-. No tiene otra idea en la cabeza. Sin embargo, el club blanco no quiere hacer ninguna locura económica (180 millones de euros piden los ‘diablos rojos’).
Aquí entra en escena el jugador. Pogba, si se acerca el 8 de agosto -fecha en la que se cierra el mercado de fichajes en la Premier- y el United no lo ha vendido, forzaría su salida, declarándose en rebeldía. Lo tiene claro porque quiere jugar en el Madrid y hacerlo al lado de los futbolistas del mundo, más concretamente del mejor. (Noticia DC: el plan de Zidane con Casemiro y Pogba)
El campeón del mundo galo tiene especial ilusión por ser compañero de Luka Modric, actual Balón de Oro, en el centro del campo porque considera que puede ser el mejor anfitrión posible, que puede aconsejarle y ayudarle en su llegada. Casemiro, el guardaespaldas; Pogba, es músculo; Kroos, la inteligencia y Modric, la clase; podrían ser cuatro hombres fundamentales para Zidane.
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