La primera de las razones es la intención del propio jugador, que desea volver a reunirse con sus amigos Messi y Suárez en el Barça. Además, Arthur, íntimo amigo del brasileño y compañero suyo en la selección también ha llegado a pedir públicamente jugar con él en la ciudad condal. Si a esto le sumas los altos salarios del club culé y su impunidad ante las sanciones, allí no tendrían problema en pagarle la cantidad de dinero que exigen tanto Neymar padre, como Neymar hijo.
Al contrario de James y Bale, Coutinho sí interesaría a los franceses, por lo que ésta sería la segunda razón por la cual en el Bernabéu no son positivos, ya que a pesar de que el club blaugrana no tiene suficiente liquidez económica, podrían incluir a jugadores como el ex del Liverpool y como Semedo que bajarían de manera considerable el precio de la operación. (Las 3 razones por las que todavía hay esperanza)
Además de esto, si finalmente, Al Khelaïfi cede a las pretensiones y a los chantajes del crack brasileño, desde Barcelona acabarían pidiendo al PSG, que la operación fuera en forma de cesión, con compra obligatoria dentro de un año, para así, poder burlar el Fair Play Financiero como vienen haciendo desde años atrás.
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