El futbolista galés salió en su vehículo del Santiago Bernabéu a falta de diez minutos para el pitido final.
Gareth Bale volvió a realizar un comportamiento que empieza a ser habitual en él. Si bien aún seguía en el centro de las miradas desde la famosa 'pancarta' con Gales, el ex del Tottenham se fue del Santiago Bernabéu diez minutos antes de que acabase el partido ante el Espanyol. Es cierto que no incumple el reglamento interno del club (ya que se explica que pueden hacerlo a partir del 80') pero no es la primera vez que recurre a ello.
El
Real Madrid venció (2-0) ante un
Espanyol que se encuentra sumergido en una crisis tremenda. Los blancos, que hoy vistieron de verde debido a la cumbre del clima celebrada en la capital, lograron su sexta victoria consecutiva en la competición doméstica.
Zinedine Zidane ha dado con la tecla y, aún con las bajas, sigue con su equipo líder (a falta de que juegue el
Barça esta misma noche ante el
Mallorca).
(El Madrid sigue a lo suyo: ganando y avisando a sus rivales).Dejando a un lado lo que sucedió en el terreno de juego,
Gareth Bale fue protagonista de nuevo. No por lo que hizo en el césped, ya que no estaba convocado, sino porque se marchó en su vehículo personal diez minutos antes de que
Jaime Latre pitase el final del encuentro. Es cierto que no incumple el reglamento interno del club y que
Karim Benzema ya había sentenciado el partido con el 2-0 final.
Sin embargo, el galés ya es reincidente. Hace poco más de un mes, en la holgada victoria de los blancos contra el
Leganés (5-0) se marchó sin ver el último gol de
Luka Jovic. Unos días después, el 2 de noviembre, hizo lo mismo en el enfrentamiento ante el
Betis (0-0). Y, la última vez que se fue del estadio antes de esta última, tuvo lugar el día 6 del mes pasado en el triunfo de su equipo (6-0) contra el
Galatasaray en
Champions League.
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