El propio Sterling, hace semanas, habló sobre su falta de gol en los inicios. Unas declaraciones que le pasaron personas de confianza del Real Madrid a Vinicius y que le han venido como anillo al dedo: "Son cosas de la edad. Llegué al City cuando tenía 19 o 20 años. Ni siquiera estaba cerca de la madurez que tengo ahora. Estar en un nuevo equipo también ayuda. Tienes que centrarte en el fútbol. Debes pensar que si quieres ser alguien que regatea a 10 rivales y luego no hace nada, o por otra parte, alguien que ayuda a su equipo a ganar. Así que se trata de madurez. Desde la primera vez que fui profesional sigo aprendiendo cada día para mejorar mi nivel de participación en el juego y sobre todo mi efectividad".
Ese consejo lo ha cogido el propio Vinicius Júnior y se lo ha grabado a fuego. En la comparativa queda bastante evidente que ambos jugadores tienen muchas similitudes. Vinicius se va de 10, sorprende en su regate, y al llegar al área se le funden los plomos... Algo muy habitual y que también le ocurría a Sterling. El inglés, ahora, se ha convertido en una auténtica máquina goleadora y sus cifras dan pánico a los rivales (15 goles y 5 asistencias esta temporada, 25 tantos y 18 pases en la 18/19, 23 goles y 17 pase de gol en la 17/18... y así sucesivamente mostrando que cada año mejora sus estadísticas).
Nos remontamos al año 2012-2013. Sterling jugando con el Liverpool y sorprendiendo con su irrupción en Anfield. Lo hace todo bien y solo tiene un ‘pero’: su falta de gol. El inglés, como Vinicius, llevaba 2 goles en 39 partidos y metía de media un gol cada 1.120 minutos de juego. El carioca del Real Madrid lleva 6 goles, en más o menos los mismos encuentros, 44 y promedia un tanto cada 391 minutos. Números muy inferiores a Rodrygo Goes, por ejemplo, que mete un gol cada 118 minutos. También son inferiores a los que actualmente promedia el mismísimo Sterling con un gol cada 126’. ¿Quién se atreve a decir que Vinicius no podrá superar al propio extremo del Manchester City en un futuro?
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