Como dice Sergio Ramos, “El Clásico no es un partido como los demás”. Los enfrentamientos contra el FC Barcelona son más especiales, tienen más rivalidad y, por supuesto, ninguno de los dos equipos quiere arriesgarse a perder y quedar retratados durante meses.
Este domingo el Real Madrid tiene una nueva oportunidad para demostrar de lo que es capaz, y aunque el miércoles en Champions no pudieron dar el golpe en la mesa que tanto deseaban, intentarán darlo este domingo, nuevamente con el calor de la afición y con las ganas de recuperar el liderato.
Zidane, dentro de lo que cabe, tiene una buena noticia para el encuentro ante los azulgrana, y es que sus dos únicas bajas son la de Hazard, que sigue con sus procesos de recuperación para volver cuanto antes, y la de Asensio, que poco a poco se va recuperando y su regreso está más cerca. (Crece la preocupación en Colombia con la situación de James )
Los demás, están completamente disponibles y a las órdenes de lo que decida Zidane para la próxima convocatoria. Descartes que tendrá muy difícil. Durante el entrenamiento, los jugadores dieron importancia a los ejercicios de posesión del esférico, presión y definición. Asensio saltó al césped y se ejercitó con y sin balón, aunque aún está al margen del grupo.
En el Clásico, la plantilla tendrá una nueva razón para hacer entender que el Real Madrid no ha muerto, y que está más vivo que nunca. Una victoria ante el FC Barcelona y una remontada ante el Manchester City cambiaría todo.
DEJA TU COMENTARIO