Sólo la Premier League parece estar dispuesta a acoger con los brazos abiertos a un futbolista que lleva años sin mostrar su mejor nivel. La posición de los equipos que quieren fichar a Bale es muy distinta, pero ambas benefician al Real Madrid. Mientras que el Tottenham necesita a un jugador de cierto caché para recuperar el apoyo de sus aficionados (decepcionados por no haber entrado en Champions), el United intenta compensar con Bale la negativa del Dortmund por Sancho.
Bale sigue teniendo apoyo en Reino Unido y considera que sólo allí puede volver a sentirse futbolista. Como ya ha confesado en varias ocasiones, todavía se ve con ganas y cree que puede disfrutar de varios años más a un alto nivel. Marcharse a China o Estados Unidos hubiese sido un error, ya que habría tirado lo que le queda de carrera por la borda sólo para hacerse un poco más rico. (¿Indirecta a Bale? Mourinho habla sobre los fichajes que necesita el Tottenham).
Algo ha cambiado en los últimos días y el Real Madrid ya sí ve posible que Bale se marche antes de que cierre el mercado. No será fácil acordar un traspaso beneficioso para ambas partes, pero existe predisposición del futbolista por salir. Antes se aferraba a lo firmado y exigía 34 millones de euros para resolver el contrato.
Zinedine Zidane está al tanto de las últimas noticias y espera ansioso que el galés se marche del club. La relación está rota desde hace meses, por lo que hubiese sido complicado seguir viéndole cada día en Valdebebas. Un peso de encima que, aunque todavía no se lo ha quitado, confía en que pueda hacerlo en las próximas semanas.
Como buenos negociadores, Tottenham y Manchester United tratarán de apurar al máximo la operación. Todo con el objetivo de presionar al Real Madrid para que se desprenda del futbolista. En Concha Espina conocen perfectamente el modus operandi de ambos clubes, pero creen que es posible llegar a un acuerdo por Bale, aunque sea sobre la bocina. Parece que sólo es cuestión de tiempo.
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