A Zinedine Zidane le preguntaban hoy, precisamente, por la labor de Odegaard con Noruega. Allí brilla con Haaland y es uno de los grandes indiscutibles en el once inicial. El ‘21’ del Real Madrid ha vivido un intensísimo parón de selecciones, por culpa del mal llamado virus FIFA, y ha disputado hasta tres partidos con la selección dirigida por Lars Lagerbäck.
111 minutos con Serbia, en el primer partido, saliendo de inicio y siendo sustituido en la prórroga. En ese choque las pulsaciones iban a mil por hora ya que tenía que saber si jugaría (o no) en la Eurocopa 2020, aplazada al 2021, del próximo verano. No lo logró, pero se comió un ‘palizón’ de minutos que disgustó a Zizou. 70 minutos ante Rumanía (en el 4-0) y 78 minutos (1-0) ante Irlanda del Norte. Ese fue su bagaje. Un total de 259 minutos en tres días. Ese es el verdadero motivo por el que no irá convocado frente al Cádiz.
Zinedine Zidane sabe que la próxima semana es la primera más crucial de toda la temporada. Se estrenarán en Champions, en Valdebebas, ante el Shakhtar Donetsk y luego, a posteriori, viajarán a Barcelona para enfrentarse al Barça en el primer Clásico del curso. Dos partidos de capital importancia en los que podría ser titular, según el plan que maneja el míster marsellés con él. Aunque el club ha notificado una lesión y corre riesgo de perdérselo. Todo queda a manos de saber si Odegaard, finalmente, pasa las pruebas del lunes y avanza favorablemente de sus problemas.
Odegaard viene, además, de pasar por unas duras molestias en su rodilla en el final de la temporada pasada. Zizou mantiene la guardia y no piensa correr ni un solo riesgo. De hecho, unas molestias en el sóleo derecho le deja pendiente de evolución y es por ello por lo que será descarte ante el Cádiz, en un encuentro marcado por las rotaciones que sacará en liza el marsellés.
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