Vinicius y Rodrygo acompañaron a Benzema en la punta de ataque. La única novedad fue la suplencia de Asensio, pero se puede entender debido a sus últimas actuaciones en las que no ha estado a la altura. No atraviesa su mejor momento y Zidane prefirió darle la titularidad a Rodrygo.
El resto, de carrerilla. Lucas de lateral, Varane, Nacho, Mendy, Casemiro, Kroos y Luka Modric. La medular con la que conquistó Europa tres veces consecutivas. El galo confiaba en ellos para salvar el matchball y no le salió nada mal la jugada.
Zidane se mantuvo invariable durante casi todo el partido. Solo cambió a Rodrygo, que se fue en el 66' por Marco Asensio. No jugaron algunos como Martin Odegaard, Isco Alarcón o Marcelo Vieira. El técnico del Real Madrid ni siquiera dio descanso a Modric o Benzema, quiénes lo están jugando todo.
Con esta victoria, el Real Madrid ya pone su mira en el encuentro del próximo miércoles. Un triunfo ante el equipo alemán supondría el pase a octavos de final de la Champions y un importante ingreso económico para el club. Así como, por supuesto, garantizar la continuidad de Zidane.
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