El Atalanta es una auténtica montaña rusa. Un equipo que marcha 8vo en la Serie A y que se llevó un 0-5 de la visita del Liverpool, pero que logró ganar 0-2 en Anfield para conseguir pasar de ronda. Una auténtica gaseosa que está agitada, además, por culpa de un conflicto interno con Gian Piero Gasperini.
Ese conflicto interno lo lleva Gasperini con el Papu Gómez y con Illicic, dos de las grandes estrellas del equipo de Bérgamo, que están enfrentadas con el míster. “Cuando me vaya se sabrá toda la verdad”, amenazó el propio el Alejandro Gómez, el Papu, sobre su posible salida. ¿Llegará al duelo con el Real Madrid? Está por ver si ambas partes se entienden y arreglan los problemas… o si, por el contrario, el Atalanta llega en cuadro al cruce de octavos de final de la Copa de Europa.
En lo referente a lo deportivo. El equipo lombardo juega con un 3-4-2-1 y opta por un fútbol vistoso y disfrutón. Al Atalanta no le pesan los grandes partidos y siempre suele usar ese mismo dibujo. No esperen un equipo que salga a arreplegarse y a esperar a que el Real Madrid le ataque. Saldrán sin miedo, de forma descarada, optando por el juego en vertical y dejando claro que no tienen nada que perder.
Los datos del Atalanta son totalmente demoledores: llevan dos años seguidos siendo el equipo más goleador de Italia. 77 y 98 goles son el bagaje del descarado conjunto de La Dea. Ese mismo aspecto, temible en ataque, es su punto en contra: la fragilidad defensiva. Atacan con tantos hombres que les es difícil bascular y salir replegándose. Un disfrute para el espectador, pero un quebradero de cabeza para Gasperini.
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